Esta mañana, en el fondo del armario, sin hacer limpieza, he encontrado una sonrisa pasada por agua y llena de buenas intenciones. No recuerdo haberla guardado en ningún momento, pero era mía, así que me la he puesto, y he decidido que va a ser mi sonrisa de los domingos de mayo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario