Cómo es la asociación de ideas. Ayer escuchaba esta canción cuando un mosquito fue a estamparse en mi ojera (menos mal que no en mi ojo) y, a consecuencia del impacto, falleció. Pensé entonces que esta melodía era excelente para morir. Sin embargo, en seguida caí en la cuenta de que, en general, uno no puede elegir la banda sonora de su final. Inmediatamente, rectifiqué mi pensamiento. Este es un magnífico sonido ambiente para suicidarse. No es que yo promueva esta práctica. Muy al contrario. He de decirles que la vida es maravillosa. Pero, si sus razones son más poderosas para quitársela, puedo contribuir a un ocaso más placentero aconsejándole que se suicide con esta canción. Poco después de la mitad se vuelve apoteósica y el final no llegará a escucharlo…
... sin embargo, tenga cuidado, piénselo dos veces porque, pese a todas las miserias que pueden rodear su existencia, quizá, y sólo quizá, podría ocurrir que, una vez empiece a oír esta maravilla, le asalte el deseo irrefrenable de querer disfrutarla una segunda vez...
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