sábado, 23 de mayo de 2009

Cuenqueando

Hemos estado unos días asomados a Cuenca. Oye, tan cerca, y tan mona. Hemos probado el morteruelo, el ajoarriero, los zarajos, el resolí y el alajú. Todo buenísimo. Hemos cruzado un puente, hemos subido unas cuantas cuestas, y hemos vuelto a flipar con un museo de arte abstractísimo de un tal Antonio. Teníamos terraza en la posada donde hemos dormido. Terraza con rosal y con vistas a la Hoz del Huécar. Allí hemos sacado una bañerita hinchable para el baño de nuestro nuevo acompañante viajero.

No hay comentarios: