He descubierto que no tengo instinto maternal, pero reboso del más puro y primitivo instinto animal. Soy capaz de sacar los dientes, de morder y de gruñir. Así que cuidado con el peque. Grrrrrrrrr.
domingo, 22 de febrero de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario