miércoles, 6 de febrero de 2008

Fantasmas

Una mujer de negro en la ventana a la noche. Inmovil. Mirando el lago. Cuatro historias diferentes. La misma protagonista. Un asesinato en 1972.

Vamos, que tenemos todos los ingredientes para una peli de terror, pero no, es la puta realidad. Hace poco tiempo repasabamos la cantidad de personajes que hemos conocido en estos dos años, en todas sus ramas y vertientes, y la verdad es que nunca pense que se uniría al clan el personaje incorporeo, sin nombre, ausente, pero de vez en cuando presente.

Resumiendo, que tenemos fantasmas. O eso dicen.

Todo empezó como empiezan estas historias. Con otra historia.

Un día Ruben, uno de esos huéspedes que se instalan una larga temporada de vez en cuando en el hostel, contó que un pibe había visto una chica vestida de negro en su habitación por la noche haciendo "una especie" de ritual. La fantasma. Y que al día siguiente el chico, australiano, había llegado con un crucifijo y había exorcizado la habitación. No le dimos bola al asunto, porque Ruben es buen tío pero un limado (yanki) y le creemos poco y nada, y los implicados, buena onda, no nos comentaron nada.

Al día siguiente, que trabajaba el Rubio, es decir, que se tiró de la cama mate en mano a las 8 y algo con pocas horas dormidas, se encontró a dos pibitas, jovenes y acojonadas en el living. Tenían reserva para tres días pero se iban esa misma mañana. El Rubio les preguntó si había pasado algo, porque las vio tal cara que se asustó. Y ellas, con risa nerviosa le dijeron que les daba verguenza. Pero hablaron, porque estas historias siempre se cuentan.

Una de ellas explicó que había despertado con pesadillas y se habia metido en la cama de la otra. Y no se pudo dormir, y cuando volvio a abrir los ojos, zas, allí estaba, inmovil, mirando por la ventana, una mujer de negro.

Os podreis imaginar que Iñaki, bastante dormido todavía, se quedó flipado (no sabía todavía la historia del día anterior) y las dijo que obvio, que si tenían miedo, pues se fueran. Y lo hicieron. Como alma que lleva el diablo.

El cachondeo ese día fue tremendo y cuando regresaron las pedenjas porque con las prisas en salir se habían dejado hasta las zapatillas, el tercer grado a la amiga (la otra no se atrevió ni a subir a la habitación), fue tremendo. Cierto es que otra chica dijo que tambien había tenido pesadillas (y TODOS tenemos sueños muy pero que muy reales acá) pero lo achacó a dormir cada día en un sitio diferente, con gente extraña y demás.

El asunto dio para muchas risas y comentarios, pero se archivó, porque surgieron otros . El hostel es un mundo en si mismo, y encima con la mejor tele de plasma del mundo. Ya sabeis los que habéis estado aquí, y si no, tendréis que comprobarlo in situ.

Pasa el tiempo y todo continua tranquilo. Ninguna aparición. Y de repente, de nuevo.

Nos vamos a Tronador, a intentar subirlo y cuando volvemos, otra vez, la visitante haciendo de las suyas. Y otra vez otras dos tías acojonadas durmiendo en el living (parece que lo han pillado por costumbre...). Laburaba Martin, nuestro amigo y segun nos contó, una de ellas había sentido como "una presencia" la tocaba por la noche, y se bajaron a dormir al salón. Y estas no sabían nada, ni nadie las había hablado, porque por suerte, Ruben ya se había ido.

Asi que nos pusimos a la búsqueda. Esto es un pueblo, y todo se sabe, aunque se esconda. En 1972 mataron a dos chicas cerca de aca (a dos cuadras), en la playa, y los asesinos quedaron impunes porque eran de las familias poderosas de aca. La España profunda en la Argentina del 72.

Y según cuentan estas chicas llevan apareciéndose en el hotel Huemul desde entonces, de vez en cuando, sin joder, pero pegando sustos.

Así que empezamos con la joda (ejem, yo con mis reservas, ya sabéis que soy bastante cobardica con estos temas) de que se habían trasladado aca por aquello del cambio de aires, riendo y sin terminar de creer nada, porque llevamos viviendo aca mas de un año y medio y ninguno de nosotros ha visto nada. Bueno, el Rubio vio una sombra, pero nunca le dio mucho crédito...y uno de los obreros decía que la casa estaba "endemoniada" pero era un evangelista tarado....

Y en esto, y termino, que me enrollo, que salimos a cenar con Gusano, otros amigos y un alemán, que lleva un par de semanas con nosotros y es como de la familia, y salio la historia. Y cuando se la conté a Miguel, el alemán, casi se le caen los ojos en el plato, y dijo "ahora lo entiendo todo". Coño, y en ese momento, la que casi se tiene que poner celofan pa sujetarse las orbitas fui yo. Porque le vi la cara, y a este sí le creo.

Lo contó sin miedo, porque no lo tiene, pero con sorpresa. Y habló de la mujer vestida de negro. Que miraba el lago. Media hora inmovil. Y de como a la mañana siguiente cuatro o cinco que curiosamente también la vieron, en una extraña conversación hablaron de ella y todos pensaban que era otro de la habitación, pero no era nadie, porque la única chica del dormi estaba dormida.... y lo dejaron estar. Y Miguel se olvidó de ello hasta que yo conté la historia. Y entonces recordó que le pareció raro que no se moviera durante media hora, y que mirara el lago fijamente....

Así que ahora sí que estamos un poco moscas.

Yo no he visto nada. Ni el resto de los inquilinos (y perennes somos 5). Pero otros si. O eso dicen.

¿Existe? y si es así... ¿qué es? ¿tiene relación con el 72? ¿es energia positiva o negativa? ¿que quiere?

Que se yo. Supongo que habrá mas capítulos. Os iré contando....

2 comentarios:

Anónimo dijo...

joder, que miedito... Por favor, cuando vaya el año que viene, tenerme el problema solucionado que no quiero cagarme del susto y dormir en el salón... UUUUUUUUU!!!

Anónimo dijo...

quiero que se sepa la verdad, que se sepa la verdad, que se sepa la verdad...investigad...que paguen los que lo hicieron...sólo éramos unas crías...teníamos toda la vida por delante...vos nos podés ayudarrrr